Antes de entrar en lo que es la publicidad actual, es hora de tomarnos un pequeño viaje a la psicología. Un mensaje subliminal, también llamado mensaje oculto, está diseñado para pasar por debajo de los límites normales de la percepción.
Estos mensajes son inaudibles para la mente consciente pero audibles para el subconsciente o la parte profunda de la mente.
Un tipo popular de mensaje subliminal es aquel que se repite constantemente en una grabación mientras se duerme, buscando que la mente subconsciente sea la que retenga el mismo. En resumen, el mensaje subliminal es la práctica de utilizar palabras o imágenes (estímulos) que los consumidores no detectan conscientemente. En este artículo algunos ejemplos de lo qué NO es una publicidad subliminal, y de cómo varias empresas lograron con éxito colocar este tipo de mensaje oculto en su plan de negocios.
Mensajes subliminales en la publicidad
El primero en introducir los mensajes subliminales en la publicidad es James Vickery, en un experimento que buscaba transmitir mensajes indetectables en un cine Nueva Jersey. Luego sería reiterado por el economista y sociólogo Vance Packard en su libro “The Hidden Persuaders”, de 1957. (Fuente: Wikipedia)
Según Vickery, los resultados habían sido excelentes, aumentando la venta de Coca Cola y palomitas en el cine. Sin embargo, más tarde se revelaría que todo había sido un engaño, totalmente falso.
El problema es que, a pesar de estar todo inventado, la idea de un mensaje subliminal en el marketing causó pavor en las personas. Después de todo, nadie quiere sentirse manipulado. Pero la verdad es que no existen evidencias concretas acerca de la funcionalidad de la publicidad subliminal, aunque sí hay un estigma claro alrededor de la misma.
Veamos ahora qué es y que no es una publicidad subliminal.
Qué no es una publicidad subliminal
La primera regla de cualquier publicidad subliminal es que no debe ser obvia. Reitero, las personas no quieren sentirse manipuladas, lo que es un riesgo inherente de cualquier publicidad oculta. Por esta razón, cuándo un mensaje pierde su sutileza, se vuelve obvio.
He aquí algunos ejemplos de lo que no es una publicidad subliminal:
The Food Network y McDonald ‘s
The Food Network fue noticia en 2007 cuándo fue atrapada insertando una imagen flash del logo de McDonald ‘s durante el popular show Iron Chef.
Esto es un claro ejemplo de cómo no debe hacerse una publicidad subliminal, ya que es completamente obvia. No hay ninguna intención de ocultarlo, y el factor de que el flash no esté para nada relacionado con el tema en cuestión tampoco ayuda.
KFC’S Dollar Snacker
En este caso es necesario detenerse un tiempo para verlo, pero una vez que lo hiciste, no puedes ignorarlo. KFC, en 2008, atrajo mucha atención negativa cuándo en un comercial aireado mostraron un billete de un dólar sobre una lechuga.
A primera vista se nota que es un trabajo a medias, lo que hace más difícil que funcione.
Burger King
En 2009, Burger King lanzó una campaña publicitaria en dónde promovía su nueva hamburguesa. Las características de esta campaña rápidamente hicieron eco, ya que en la misma se ve a una mujer con la boca abierta, enfrentando el producto; todo bajo el lema “It’ll blow your mind away”.
Definitivamente las implicaciones de este mensaje no son sutiles. Para una publicidad que busca vender un sándwich, las metáforas sexuales son bastante obvias.
Publicidades subliminales que sí funcionan
En este apartado veremos algunas publicidades que muestran cómo debe ser un mensaje subliminal: inteligente. Existen publicidades que hacen que un espectador se sienta orgulloso de encontrar el mensaje oculto.
No debe sentirse como un intento de lavado de cerebro o hipnotismo. Las personas no quieren que bromeen con ellas, sino que quieren ser parte de la broma.
Es decir que una buena publicidad subliminal necesita saber jugar con las imágenes y las ilusiones ópticas. He aquí algunos ejemplos:
Pepsi vs Coca
Sutil, pero efectivo.
Pepsi fue la primera en revelar una publicidad jugando con el “horror” de recibir una Coca cuándo realmente se quería una Pepsi.
La respuesta de Coca fue mejor, capitalizando la misma publicidad pero mostrando a su producto como el héroe de la historia.
Esta publicidad subliminal funciona muy bien debido a que los dos competidores supieron manejar a los consumidores para que vean sus respectivos productos en una luz positiva, mientras que a la vez mostraban la sombra de su competición.
Amazon
Amazon posee uno de los logos más reconocibles de la actualidad. Pero no importa cuántas veces lo hayas visto, probablemente nunca te diste cuenta del mensaje oculto que posee. Siendo sincero, ni yo mismo me había dado cuenta hasta hace poco.
En cualquier caso, el mensaje se encuentra en la flecha y su ubicación. El mensaje es simple: Amazon vende todo, de la A a la Z. Es un toque sutil, pero que refuerza el concepto de que en Amazon, efectivamente, encuentras de todo.
Toyota
¿Alguna vez viste de lleno el logo de Toyota? Si lo hiciste, tal vez notaste el pequeño mensaje subliminal que guarda.
El logo luce como un gráfico rutinario de las compañías de auto, sin embargo, si se observa cuidadosamente, se puede encontrar un significado oculto. Y es que varias partes del gráfico deletrean la palabra “Toyota”.
Conclusión
La publicidad subliminal es una técnica controvertida que implica la inserción de mensajes o imágenes no percibidos conscientemente por la audiencia, pero que se cree que tienen un impacto en sus actitudes y comportamientos. Se basa en la premisa de que estas señales invisibles pueden influir en las decisiones del consumidor de manera sutil, sin que este sea consciente de la manipulación.
Sin embargo, es importante destacar que la efectividad real de la publicidad subliminal ha sido objeto de debate y escepticismo en la comunidad científica. No hay evidencia concluyente que respalde su eficacia de manera consistente, y muchos estudios han cuestionado su capacidad para influir significativamente en el comportamiento del consumidor.
Lo que NO es la publicidad subliminal es la manipulación directa y engañosa de la audiencia. Aunque se ha especulado mucho sobre la presencia de mensajes subliminales en anuncios, es crucial distinguir entre estrategias publicitarias legítimas y prácticas potencialmente engañosas. La publicidad ética se basa en la transparencia y el respeto por la autonomía del consumidor, comunicando mensajes de manera clara y honesta.
La publicidad subliminal, en su sentido más oscuro, a menudo se asocia con intentos de influir en las decisiones del consumidor de manera no ética. En la industria publicitaria, la integridad y la honestidad siguen siendo valores fundamentales para construir relaciones sólidas y a largo plazo con los consumidores.
La publicidad subliminal se trata de sutileza, no es cuestión de manipular el comportamiento de la gente y obligarlos a consumir un producto en específico. Se trata de enviar un mensaje escondido que refuerce el concepto de una marca, y a su vez juegue y deje participar al consumidor que encontró el mensaje.
Si quieres conocer aún más ejemplos sutiles de publicidad subliminal, no dudes en visitar nuestro artículo sobre qué es la publicidad subliminal, que posee otros cinco ejemplos imperdibles.
